27 de octubre de 2010

Navigator de Navsat: una herramienta útil

Una evaluación de usuario

Luego de experimentar, hace unas semanas, las múltiples ventajas de conducir en el exterior utilizando un dispositivo de navegación satelital GPS, al regresar a Costa Rica tuve la curiosidad de probar el sistema Navigator que ofrece en nuestro país la empresa Navsat (con la cual –lo aclaro desde ahora– no tengo más relación que de ser cliente reciente).

Disponible en varios establecimientos comerciales por un precio inicial de ¢149.000 (al momento en que escribo), este sistema ofrece:

  • El dispositivo Navigator en sí, pre-configurado con el mapa completo de carreteras de Costa Rica; y,
  • Un año de servicio de información de tránsito (congestión vial, accidentes, cierre de carreteras, etc.), que se recibe por medio de algunas de las dos antenas adicionales incluidas en el paquete.

El aparato requiere de una configuración mínima, que se realiza la primera vez que lo enciende, incluyendo cosas tales como elegir el tipo de voz que utilizará para darle indicaciones de manejo de forma verbal. En mi caso, escogí una agradable voz femenina, con acento de España, que resulta muy clara y placentera de escuchar.

Según se indica en el apartado de preguntas frecuentes del sitio web de la empresa, al cabo del año se puede decidir si continuar o no recibiendo el servicio de información de tránsito, con un costo de seis dólares mensuales.

La utilidad principal de un sistema de navegación satelital, desde luego, está en determinar cómo llegar desde el punto A hasta el punto B. En un país tan pequeño como Costa Rica, usted podría creer que un sistema de esta clase le puede traer poca o ninguna utilidad, ya que en términos generales uno cree saber cómo llegar a todas partes con relativa facilidad. Sin embargo, estaría equivocado y voy a intentar explicar brevemente por qué.

En el diario ajetreo de trasladarnos desde un lugar a otro, usualmente nos encontramos ante una de tres alternativas:

  • El destino es un lugar desconocido –o poco conocido– y no tenemos una idea precisa de cómo llegar. En este caso, las bondades de un sistema como el Navigator son obvias, pues no sólo le dirá la ruta sino que procurará llevarlo además bajo las mejores condiciones de tránsito posibles.
  • El destino es un lugar más o menos familiar, pero no estamos 100% seguros acerca de cuál pueda ser la mejor trayectoria entre las diversas alternativas que conocemos. En tal supuesto, el Navigator también le resultará de provecho y en su recorrido podría incluso sorprenderse de conocer nuevas posibles rutas, o bien apreciar las ventajas de un recorrido que quizás no hubiera sido su primera elección. O bien,
  • El destino es un sitio bien conocido, respecto del cual uno está seguro de conocer la ruta óptima. Aún en este escenario, descubrirá que el Navigator puede ahorrarle tiempo y molestias, ya que el volumen de tránsito podría ser distinto del normal en ese día en particular, o bien podría haber ocurrido algún accidente u otra circunstancia que haga que tomar ese camino familiar no sea lo más deseable en ese momento.

Pero lo anterior no es todo. El Navigator contiene una base de datos de puntos de interés que se puede aprovechar no sólo como destinos por sí mismos, sino además como referencias para ubicar otras direcciones situadas en los alrededores de dichos puntos. Se incluye información de restaurantes, parqueos, gasolineras y otras clases de establecimientos comerciales. Suponga que descubre que necesita combustible o que se le ha pinchado un neumático. En un caso como este, puede pedirle al Navigator que le indique cuál es la estación de servicio más cercana al sitio en que se encuentra, lo cual es de obvia utilidad. La base de datos de restaurantes está clasificada por tipos de comidas, de modo que usted puede, por ejemplo, pedirle al Navigator que le muestre cuáles son los restaurantes de comida italiana más cercanos a su lugar de destino, o sobre la ruta actual o bien respecto de su ubicación en ese preciso momento.

Al llegar a cualquier sitio, usted puede fácilmente agregar la dirección a una base de datos de lugares Favoritos, facilitando la navegación futura hacia sus destinos frecuentes. Esta base de datos puede ser respaldada en su computador por medio del cable de conexión USB incluido y del software que se obtiene al registrar su dispositivo por medio de Internet en el sitio www.naviextras.com. Este mecanismo también es el que se utiliza para descargar futuras actualizaciones de mapas o bien del propio software del aparato.

En la determinación de rutas, usted puede especificarle al Navigator que emplee ciertos parámetros. Por ejemplo, si lo desea puede especificar que no le lleve por carreteras de peaje, o bien que tome en cuenta vías no asfaltadas (que normalmente se excluye). También puede elegir entre recorridos alternos; aunque usualmente usted querrá que el dispositivo lo guíe por la ruta más rápida a su destino, también podría optar, por ejemplo, por un trayecto no necesariamente más rápido sino más "fácil" (imagino que esto implica cosas tales como minimizar el número de giros a la izquierda en vías de doble sentido, que suelen ser una de las principales causas de problemas al manejar).

El mapa de carreteras incluye además la información relativa a los límites de velocidad permitidos en cada lugar. De este modo, el Navigator puede advertirle si ha excedido la velocidad legal a lo largo de su camino. Claro está, todos sabemos que en muchos sitios de nuestro país, esos límites son francamente ridículos, pero eso no es culpa del Navigator... prepárese para escuchar “Ha excedido el límite de velocidad” en los lugares más increíbles. El dispositivo tiene además un detector de radar, cuyo uso sin embargo es técnicamente ilegal en Costa Rica (artículo 119 de la Ley de Tránsito).

A medida que he estado usando el Navigator, se me han estado ocurriendo otras ventajas del dispositivo en las que uno al principio podría no pensar. Suponga, por ejemplo, que va usted conduciendo por una carretera rural con la que no está demasiado familiarizado, bajo condiciones de niebla o de lluvia intensas. Probablemente todos los conductores nos hayamos encontrado alguna vez en una peligrosa situación de esas, en las que la visibilidad se reduce prácticamente a cero. En este caso, el Navigator podría literalmente salvarle la vida, mostrándole por dónde va la carretera (siempre y cuando, obvio, las condiciones del clima no le hagan perder la señal GPS).

Ahora bien, dicho todo lo anterior, no puedo ocultar que he encontrado algunos problemas y deficiencias con el uso del Navigator. Por ejemplo, en algunos casos me ha hecho la indicación de realizar virajes claramente ilegales. En estos casos, he optado por enviar un correo electrónico a la empresa reportando el problema. Hasta ahora, la respuesta ha sido rápida, indicándome que se hará la corrección en la siguiente actualización del mapa.

IMAG0179Por otro lado, he descubierto que la información sobre el estado del tránsito no siempre es la más precisa, por decirlo amablemente. Ha habido varias ocasiones en las que el dispositivo me ha "embarcado", como decimos popularmente en Costa Rica, llevándome directo hacia espantosos embotellamientos (como el de la fotografía anexa). He notado que esto es particularmente cierto en San Pedro de Montes de Oca, por ejemplo en los alrededores de la Universidad Latina y el Colegio Calasanz. La página web de la empresa distribuidora asegura que la información de tránsito se obtiene a partir de sensores y de los datos que reportan sus colaboradores motorizados. Si es así, puedo asegurar que se necesitan muchos más de esos en áreas como San Pedro, Sabanilla y Guadalupe. Además, a veces sucede que si decido hacer una corrección del rumbo sugerido, el tiempo estimado de llegada al destino mejora, llevándome a preguntar en voz alta, “¿Entonces por qué no me propusiste esta ruta desde el principio?”. Nunca me responde. ;-)

Otro problema es que, al menos por el momento, no es posible especificar destinos por medio de coordenadas geográficas (latitud y longitud), lo cual parece extraño, ya que cuando se almacena una dirección como favorita, el aparato despliega esos datos en pantalla, junto con el de la altitud. Tampoco es posible almacenar rutas personalizadas, para el caso de que uno quiera seguir una trayectoria predeterminada, quizás aprovechando únicamente la información de tránsito del Navigator.

Otras cuestiones:

  • El paquete incluye una guía rápida de usuario (lo cual es bueno), pero no existe –que yo sepa– la posibilidad de obtener un manual más completo, que explique cosas que no aparecen en la guía. Por ejemplo, no hay explicación para algunos de los colores y símbolos que se ven en pantalla. Una manual electrónico (HTML o PDF, quizás) sería muy deseable.
  • La duración de la carga de la batería interna debería ser mejor. Se toma más tiempo cargándola que lo que tarda en necesitar una recarga. El dispositivo incluye un conector para el encendedor del carro, pero estos no solo resultan estéticamente impresentables, sino que el mío al menos tiende a desconectarse –y a apagar el Navigator– al pasar por algún bache... cosa nada inusual en Costa Rica (suspiro).
  • La empresa vende separadamente un estuche para el dispositivo, pero no se puede adquirir más que en sus oficinas centrales. No me explico por qué no está disponible en los mismos puntos de venta del paquete.

Con todo y todo, siento que, en balance, la experiencia de utilizar el Navigator ha sido buena. Hay que agregar que el dispositivo tiene la capacidad de almacenar mapas de otros países, por medio de tarjetas de memoria. Dichos mapas se pueden descargar desde Internet y permiten sacarle provecho adicional al aparato en algún viaje al exterior.

Espero que el sistema adquiera una cantidad suficiente de usuarios que permitan a la empresa distribuidora mantenerse y ofrecer mejores servicios y/o precios en el futuro. Aquellos de nosotros que no consideramos el manejo diario precisamente como la experiencia más gratificante lo apreciaríamos mucho.

22 de octubre de 2010

Publican diario oficial electrónico y firmado digitalmente

Las personas que visitan el sitio web de la Imprenta Nacional para revisar la edición electrónica de "La Gaceta" toparon hoy con una sorpresa: la posibilidad de obtener una versión PDF firmada digitalmente del diario oficial (archivo de 936 kb).

Bajo la ley 8454 de documentos electrónicos, certificados y firmas digitales, dicha edición es -para todos los efectos legales- exactamente igual de válida que la tradicional versión impresa.

¡Un gran avance!

21 de octubre de 2010

Presidencia de la República se digitaliza

Según comenta hoy el diario La Prensa Libre (e informaron también ayer otros medios televisivos), la Presidencia de la República ha dispuesto universalizar el uso de las TICs y, en especial, de la firma digital, para acelerar los trámites a cargo de ese despacho, incluyendo suscripción de decretos y otros actos administrativos.

Por desgracia (y como es usual en la cobertura noticiosa de esta clase de tecnologías) existe un error básico en el texto del artículo, cuando afirma que "La firma digital es una tarjeta con información registrada en un chip, donde se incluye la firma de cada persona en forma encriptada". Lo correcto es que la tarjeta almacena un certificado digital, a partir de cuyos datos es posible generar firmas digitales.

15 de octubre de 2010

Rescate de los mineros en Chile: ¿ciencia o milagro?

Las personas que quieran creer que en el rescate de los mineros de Chile intervino alguna fuerza sobrenatural, o que la oración jugó algún papel en este drama -quizás dando esperanza y fortaleza a rescatistas y rescatados- están en su derecho y nada tengo que decir al respecto. Pero cuando el fanatismo y la irracionalidad llegan a un extremo como éste, la verdad es que cuesta mucho contener la rabia.

En La Prensa Libre de hoy, la señora(ita) María Elena Jiménez Vega escribe un artículo llamado "El milagro y la cortina de humo". En este comentario leemos lo siguiente (las mayúsculas son literales):
"Hoy destaco el hecho de que la hazaña no es de Sebastián Piñera, ni de los especialistas que trabajaron en la operación. El milagro del rescate es de un ser supremo llamado JESÚS quien quiso mostrarle al mundo, a los millones de televidentes que presenciaron la gesta, que ÉL está vivo, que es un DIOS de milagros y de misericordia y que la Gloria del éxito de la misión es únicamente de ÉL."
No sé qué piensan ustedes, pero para mi esta es ni más ni menos que una bofetada a la cara de la enorme cantidad de personas -desde el Presidente de Chile hasta el último de los heroicos rescatistas- que pusieron sangre y sudor por devolver a la superficie a los mineros atrapados.

Ya lo dije antes, pero valga repetirlo: el exitosísimo rescate fue una proeza de la voluntad humana; un despliegue de nobleza y técnica. Me disculpa doña María Elena, pero yo en la televisión nunca vi a Jesús cavando para sacar a los hombres de las entrañas de la tierra. Lo único que vi fue la entrega de personas de carne y hueso, trabajando con lo mejor que la ciencia y la tecnología podían ofrecer, para alcanzar la meta anhelada. Y todo ello con el respaldo incondicional de los familiares de las víctimas, del pueblo chileno y de todas las personas de buena voluntad del mundo entero, tanto creyentes (de todos los signos) y no creyentes también.

Ojalá fuera cierto que para salvar a estos trabajadores no se necesitara de nada más que de Jesús (pues dice doña María Elena al inicio de su artículo que "todo lo que pidan al orar con fe lo recibirán"). Se hubiera economizado mucho tiempo, dinero y, sobre todo, sufrimiento. Presumiblemente, los mineros habrían sido milagrosamente elevados a la superficie, a través de 700 metros de roca. Eso sí que hubiera sido impresionante.

Pero, tristemente, tenemos evidencia cierta e incontrovertible de que rezar 24/7, por más fervor que se ponga en ello, dista mucho de garantizar ninguna clase de resultados. Después de todo, en innumerables tragedias mineras anteriores, decenas de humildes trabajadores perdieron la vida (algunos de los cuales incluso nunca fue posible localizarlos), a pesar de un mar de oraciones llenas de fe de familiares, compañeros de labores y personas de buena voluntad.

Así es que, como dije, quien quiera atribuir alguna cuota del éxito en Chile a sus rezos, está en su legítimo derecho. Pero no insultemos a todas esas personas que dieron lo mejor de sí por salvar a sus congéneres, diciéndoles que el éxito y la gloria no les pertenece también.
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Notas posteriores:
  • El título de la noticia, en La Nación de hoy, lo dice todo: "No hubo milagro en Ecuador: mineros encontrados muertos". Cuatro trabajadores fallecieron. Pareciera que ese día Jesús andaba ocupado en otras labores. (21/10/10).
  • Y ni qué decir de la nota de hoy: "Agonía marcó a parientes de mineros ecuatorianos". Dice la noticia: "Padres, madres y esposas de los mineros ecuatorianos Ángel Vera y Pedro Mendoza sufrieron seis días de agonía y de dormir en improvisados dormitorios para ser informados, el miércoles, de que sus familiares habían muerto producto de un derrumbe a 150 metros de profundidad. (...) Con sus manos juntas y mirando al cielo, la madre de Vera preguntaba una y otra vez '¿Por qué, por qué?'". Pregúntenle a doña María Elena Jiménez. (22/10/10).

12 de octubre de 2010

¡Grande, Chile!

La dura prueba por la que han pasado los mineros chilenos y su exitoso rescate constituyen un hito histórico memorable y fundamental. Su importancia radica en que lo que ha acontecido durante algo más de dos meses en el desierto de Atacama sirve para poner en exhibición algunos de los rasgos que más nos distinguen y enoblecen a los seres humanos:
  • Ingenio
  • Tenacidad
  • Esperanza
  • Solidaridad
  • Altruísmo
Ha sido un triunfo de la voluntad y nos llena de optimismo. Lo ocurrido debería servirnos a todos como lección de lo que somos capaces de lograr como especie cuando ponemos nuestras prioridades en el orden correcto. Chile nos ha dado esa lección. Y por eso, aunque suene a cliché, no me resisto a gritar: ¡Hoy todos somos chilenos!

11 de octubre de 2010

Nueva versión de proyecto de ley sobre datos personales

Según el boletín noticioso de la Asamblea Legislativa del pasado 5 de octubre, la Comisión de Asuntos Jurídicos aprobó un texto sustitutivo para el proyecto de "Ley de protección de la persona frente al tratamiento de sus datos personales", expediente número 16.679.
"Lo que hicieron fue acoger un nuevo texto que sustituye al dictaminado hace ya un año y tiene como objetivo garantizar a cualquier persona física o jurídica, sean cuales fueren su nacionalidad, residencia o domicilio, el respeto a sus derechos fundamentales, concretamente, su derecho a la autodeterminación informativa en relación con su vida o actividad privada y demás derechos de la personalidad; asimismo, la defensa de su libertad e igualdad con respecto al tratamiento automatizado o manual de los datos correspondientes a su persona o bienes."
Pero, una cosa extraña:
"El régimen de protección de los datos de carácter personal que se establece en esta legislación no será de aplicación: (...); a los ficheros mantenidos por los partidos políticos, sindicatos e iglesias, confesiones y comunidades religiosas en cuanto los datos se refieran a sus asociados o miembros y ex miembros."
¿Qué motivo podría existir para exonerar de la protección legal los datos relativos a las opciones religiosas de las personas? ¡Justamente ese es un típico dato sensible (junto con los de historial médico, vida sexual, etc.), de los que de manera más clara requieren de que el ciudadano tenga control sobre ellos!

7 de octubre de 2010

No jugar con el buen nombre ajeno

Este artículo apareció en la sección "Foro" de La Nación del día de hoy (ver publicación)

Mi esposa, Ana Lorena Brenes, aguarda desde hace cinco meses que la Asamblea Legislativa decida si ratifica o no su designación en el cargo de Procuradora General, para el cual la reeligió la señora Presidenta de la República. Aunque hubiera preferido no referirme al tema, algunas recientes declaraciones por la prensa finalmente han derramado el vaso y me mueven a redactar estas pocas líneas, cuyo contenido espero que pueda ser juzgado de modo objetivo y no a través de la lente de mi obvia parcialidad.

Una cosa está clara: Ana Lorena está hoy atrapada en el medio de un fuego cruzado de carácter político. Aunque algunos legisladores ha intentado ofrecer algunos argumentos para oponerse a su ratificación, la pura y simple verdad es que se trata apenas de excusas para intentar dar un barniz de fundamento a lo que no es más que un pulso político que quieren ganar a toda costa, aunque ello implique llevarse por delante la trayectoria y el buen nombre de una persona.

Ni un solo razonamiento serio y fundamentado ha sido ofrecido para descalificarla. Paradójicamente, un partido la tilda de ser demasiado rigurosa en la protección de los recursos naturales, mientras que otro dice que es demasiado débil en esa materia. Se ha dicho también que en los pronunciamientos de la Procuradora no se evidencia suficiente independencia de criterio. Lamentablemente, quienes así hablan omiten precisar a cuáles pronunciamientos se refieren, ni explican en qué están equivocados, para que así al menos existiera una oportunidad de defensa.

Yo me pregunto: ¿exactamente cuánta independencia tendría que exhibir un Procurador o Procuradora para que podamos darnos por satisfechos al respecto? ¿Cómo se mide eso? ¿Será que la única manera de probar la independencia de criterio es diciendo "no" a todo lo que interese al Gobierno de la República?

Ana Lorena se ha desempeñado como Procuradora bajo tres Administraciones distintas y a todas ha brindado su máxima colaboración. Pero cuando ha debido decir que "no", no le ha temblado el pulso para hacerlo. Me consta personalmente que esto le ha acarreado más de un disgusto con funcionarios del más alto nivel. Incluso a doña Laura Chinchilla, siendo Vicepresidenta y Ministra de Justicia, debió en alguna ocasión aconsejarla en contra de alguna de sus iniciativas. Si la hoy Presidenta de la República optó por pedirle que se mantuviera en el cargo de Procuradora General, lo fue precisamente porque doña Laura sabe que la labor de un buen abogado, uno que ejerza su ministerio con verdadera ética profesional, a veces incluye decirle que no a su cliente. La Presidenta necesita y quiere asesoría competente, no sumisa complacencia.

Quizás se olvida que, al emitir sus pronunciamientos, la Procuraduría General de la República no se guía por el antojo, sino por la letra de la ley. Si uno o algunos de esos dictámenes no complacen a las señoras o señores diputados, deben comenzar por recordar que la causa de ello son las leyes que ellos mismos han dictado y que la Procuraduría simplemente interpreta y aplica.

Ana Lorena Brenes ha desarrollado una trayectoria de casi tres décadas al servicio de la función pública. Lo ha hecho con integridad y poniendo en ello su mejor esfuerzo. Ahora, todo ello pende de un hilo tan solo porque algunos partidos políticos quieren “golpear al Gobierno”. No ven que están jugando con la honra ajena. No ven que están jugando con una persona de carne y hueso; con su carrera profesional y su buen nombre. ¿Es ese el concepto de probidad, de ética, en el ejercicio de la labor parlamentaria?

De nuestras diputadas y diputados esperamos que realicen su labor teniendo por encima de todo lo que sea más justo y conveniente para los intereses nacionales. Confío en que tengan el discernimiento necesario para saber que, para lograr eso, a veces es necesario dejar a un lado las complejidades y cálculos de lo político, para simplemente hacer lo correcto.

Ver también:

5 de octubre de 2010

SINPE ya ofrece nuevo horario de operación

Tal como lo anticipé el mes pasado, el periódico La Nación de hoy informa que ya entró en operación el nuevo horario extendido del SINPE para transferencias electrónicas de fondos entre bancos.

Ahora se puede realizar esta clase de transacciones de 6 a. m. a 12 medianoche, todos los días del año, incluidos sábados, domingos y días feriados. En el futuro se pretende ampliar el servicio a modalidad 24/7.

Sería bueno que también se aumentara el límite diario de transferencia, fijado actualmente en US$2.000 y que a mi juicio es muy bajo. Sin embargo, entiendo que esta es una restricción impuesta por los bancos y no por la plataforma del SINPE en sí.

No hay peor ciego que el que no quiere ver

"Los fanáticos sinceros", excelente artículo de don Juan Manuel Villasuso en La República de hoy.

4 de octubre de 2010

Poco acceso a Internet por vía celular

Según La Nación de hoy, "Ticos no se conectan a Internet con el celular por falta de interés". Así lo revela el más reciente "Índice de brecha digital sobre uso de las tecnologías de información y comunicación (TIC)", publicado por el Viceministerio de Telecomunicaciones con base en una encuesta telefónica a 1.220 personas en todo el país durante los meses de mayo y junio.